Esta obra se consigna como un hito en la historia del arte, pieza inaugural de una nueva etapa, paso seguro a la abstracción. Se conservan algunos rasgos de la realidad conocida y del mecanismo figurativo para representarla, pero se establecen potentes señales que expresan una nueva percepción. La pintura se autoconcibe como fundadora de otro mundo, revelación de otros ámbitos de la naturaleza y la existencia. Como todo vanguardista de inicios del siglo XX, Picasso es heredero del legado plástico y teórico de Paul Cezanne - quien postuló que todo podía descomponerse en un cubo, un cilindro y una esfera - y nos muestra en sus famosas Señoritas, el proceso de quiebre con las dimensiones convencionales y el trastoque de las leyes de la perspectiva y del espacio; aspirando a retratar el cuerpo femenino desde múltiples ópticas, trabajando la pluralidad de los ángulos y los planos, rompiendo con el esquema estereotipado con que se nos presenta la apariencia de lo real. Otro elemento que distingue a esta Obra son los colores restringidos, tonos pàlidos y apaciguados sobre un fondo azul frío; las mujeres, desnudas, desprovistas absolutamente del canon establecido para la belleza femenina, parecen posar para este acto desmitificador. Las formas llenan tajantemente los planos, imponentes en la geometrìa que el pintor como con un bisturí, saca a la luz.
Picasso refleja de este modo que la "verdad" de lo que nos parece tan cierto, tan evidente e indesmentible es tan sólo una entre una amplia gama de posibilidades; que nuestra mente ha de hurgar más allá de los límites de la apariencia y que la creación más que imitación, es la génesis de otra realidad tan real, como ficticio es lo aparente.
Las mujeres que pueblan la obra de esta pintora, poseen una identidad ecléctica, dueñas de una combinación seductora entre lo clásico y lo galáctico, renacentistas y posmodernas, paganas, profanas y festivas, malignas y divinas, pecadoras, puras y sacras. Chilenas, florentinas, universales. Novias, madonnas o hechiceras, vírgenes o putas, todas o ninguna, a veces unas, a veces otras, siempre la misma. Esta mixtura, lograda mediante la forma y el contenido, construye una multiplicidad de eventuales significados que permiten una rica interacción con quienes las observan; plasma una estética innovadora y llamativa, una ambigua atmósfera que convoca, una belleza que pasma y que, de improviso, puede tornarse inexplicable y extrañamente siniestra. Atraen, pero también aterran. ¿Qué ignorada alianza hay entre ellas, entre sus pechos, entre sus manos?, ¿qué en esa cercanía, y en sus miradas agudas y lejanas?, ¿están realmente vivas o son espectros vívidos de lo muerto?, ¿y esa carne blanca, marmórea, verdaderamente late o es la envoltura perfecta de lo yermo?, ¿son sepulcros o matrices mágicas de un parto infinito y cósmico?. ¿Son todas ellas, las que vemos, o únicamente una multiplicada?.
Claramente Carmen Aldunate tiene en la pintura del Renacimiento toscano un referente poderosísimo que sin temor a evidenciarse, ella potencia, imita y recrea: dibujo riguroso como soporte, formas cerradas, el peso de los objetos, los accesorios, la tapicería, los ropajes y drapeados, deleite decorativo, detallista y minucioso, figura y fondo claramente marcados, elementos arquitectónicos como claves composicionales, la característica “ventana” que deja ver un fragmento del paisaje y con ella el enlace entre el ambiente interior y el exterior que lo circunda, metáfora posible de los cuerpos y las almas. Y he aquí uno de sus máximos logros: mediante el uso y el abuso de fórmulas, técnicas y elementos-tipo de este código estético, obtiene aquella visualidad que si bien remite sin pudores, también escapa sin tregua, que si bien emula también distorsiona y funda, aquel espacio-tiempo traslapado, transculturizado, otro. Como un péndulo que oscila, gira y vibra, vibran, giran y oscilan las imágenes y los significados; nos zambullimos en un mundo que subyuga y que nos pierde. Realista e irreal, hiperrealista y surreal, onírico y fantástico, tan creíble y verídico como el más real de los sueños y con la verosimilitud de la ficción mejor lograda.
Mención aparte merece el colorido que Carmen Aldunate instala: una tonalidad sofisticada y elegante, colores frutosos y florales que se huelen y se saborean… violetas, ciruelas y guindas, damascos, lilas y anaranjados. Un fresco y apetecible bocado, una poción primaveral y erótica que, a la usanza renacentista, puede estar envenenada.
En este desnudo se puede descubrir la confluencia de diversas vertientes técnicas y plásticas; una obra mixta en el más amplio sentido del concepto: no tan solo por la variedad de materiales empleados, por los métodos de aplicación de los mismos, por las reminiscencias del Fauvismo y del Expresionismo Abstracto, si no también por la obtención de una imagen que recoge, rehace y fusiona elementos figurativos y abstractos, un “ a medio camino “ entre dichos polos que ha sido la salida que la pintura ha encontrado al “punto muerto” de lo abstracto y al “clasicismo” de la figuración tradicional. Esta apertura se conoce como Neo figuración.
Mediante un lúdico encuentro entre la línea y la mancha, Merello reúne aquí dos formatos de construcción de la imágen: un dibujo sutil que coquetea con el croquis y que aporta cierta fragilidad y sutileza muy en armonía con el peso que agrega la materialidad pictórica de sus manchones de color, puestos con profusión, gozo y sin pudores en sus tonalidades, mezclas y contrastes. Lo cálido, lo frío, el uso del blanco y el negro desprendidos de las connotaciones de luz y sombra, generan una explosión colorida que constituye fondo y soporte de la mujer recostada sobre un lecho cromático, un desnudo en medio de una fiesta de colores.
Otros aspectos importantes de considerar en esta obra: el “horror al vacío” –herencia cretense, una de las profundas raíces del arte griego– aquel impulso a llenar el plano abundante y exuberantemente; la propensión ornamentalista y detallista también presente en la identidad femenina de Creta y que apreciamos sobre todo en el trabajo que este artista realiza en el pelo de la figura, creando una suerte de tocado; el color antagónico de la sombra o, si se quiere, la señalización de las sombras con color y que podemos apreciar en la parte superior de la espalda, en el pecho y en parte del abdomen; zonas que congregan una combinación no académica de tonos y que conforman un llamativo punto de tensión.
Finalmente, la imagen de la mujer pasa a ser un pretexto; no es su rostro bosquejado ni las sinuosidades de su cuerpo la fuente expresiva de la obra: las sensaciones de contento, de vigor, de pletórica existencia que la convierten en una diosa musical regocijada, se originan en el uso y administración del color, concebido como significación, como palabra, como mensaje…el real protagonista de esta pintura.
23 comentarios:
Impresionante crítica lírica de estas tres bellas obras de arte. Estos pintores nos transmiten la descripción de la belleza, sensualidad y magia del cuerpo femenino con el silencio de sus pinceles, pero tú, Eva, nos lo comunicas con la voz de tus palabras, que siempre es clara, acertada, lírica y hermosa.
La contemplación de este arte se convierte en placidez en tu blog.
Mi más sincera admiración. Gracias por acercarnos al arte pictórico de esta magistral forma.
Recibe mi cariño.
Me ha gustado mucho el desnudo griego, Merello. Los colores y los trazos.
Saludos.
Como cada vez que leo tus críticas y análisis, aprendo a ver las obras que nos muestras siguiendo tu punto de vista, tratando de interpretar al autor en su intención y su calidad expresiva.
La obra de Picasso, más de una vez ensalzada en su valor innovador, es la que tengo más vista, por supuesto. Las otras dos, las descubro aquí.
Un abrazo!
Pucasso siempre ha sido un enigma, para mì. Incluso, para tratar de entenderlo, leì mucho sobre el proceso de "descomposiciòn".
Pero nunca me llegò. Prefiero a Magritte.
Los otros no los conocìa. Interesantes.
Un abrazo.
Aldunate siempre me ha gustado por su delicadeza estética. Sus rostros de mujeres son tan reconocibles que no pasan desapercibidos...Picasso es un maestro, de él se ha dicho todo. Merello lo siento más fauvista que expresionista...
Siento no haber podido aceptar el reto de escribir algo inspirado en Remedios Varo, mi tiempo es cada vez más limitado.
Un beso, completa e interesante entrada.
De los tres me encanta Merello sus pinturas tienen la habilidad de hacer sentir mejor, ¿sera por el colorido o por esa falta de vacío?, no se me encanta.
Muy buen post amiga, como siempre claro. Buen finde
Siempre te leo, aunque no deje rastros :)
Un abrazo, y gracias, siempre, por tus visitas.
D
PS: palabra clave deardor :)
Bellísima e inteligente crítica puesta en palabras escritas. Tu punto de vista nos da otro punto de vista a nosotros. Gracias por tu arte!!
Un abrazo Neuquino!!
Picasso sin duda fue uno de los genios de la pintura y pasará como tal. No conocía a Carmen Aldunate, ni este cuadro suyo que me parece dignoi de cualquiera de los mejores museos del mundo. Me encanta la fusión de los colores. Muy armónico.
El desnudo no me desagrada pero no me acaba de convencer.
Como siempre te pongo mátricula de honor en los textos.
Un beso y que disfrutes del finde amiga Eva
Que maravilla Eva, éstas mujeres somos todas nosotras con sus luces y sus sombras, tienes la particularidad de hacer bellas todas las cosas, es decir: -más bellas de lo que ya son-
Genial la pintora chilena - si tuviera que colocarle un título a su obra seria...
"COMO EVA NOS VE"
Abrazos, muchos.
Hola amiga Eva muy bella tu arte
que hermosos cuadros te felicito por tu trabajo amiga para darlos
a conoser tan bella arte,gracias
por tu visita amiga,y tu comentario,pero me quedé con la duda no fuistes por tu premio o
¿no aceptas premios? el premio esta
en {Acciones del Alma}mi mundo virtual. si lo deseas ve por el
es muy bonito.
Un abrazo amiga que estes muy bien.
Las mujeres de esas pinturas, vistas por ti, recobran vida...
Saludos Eva
Eva:
Llegar hasta tu Academia en donde se respira buen estilo y arte es un goce que no se puede desperdiciar. Haces gala de un profundo conocimiento sobre las obras de las que nos hablas con un lenguaje bien manejado, lírico, congruente, exquisito, lleno de matices hasta tal punto que pareciera que, en lugar de hablar, pintas las obras de arte que nos dejas para nuestro asombro. La metáfora irrumpe plena de contornos vivaces y luminosos en esa exuberante exégesis que nos dejas en esta entrada. No hace falta, obvio decirlo, hablar más de Picasso porque ya tú lo has hecho muy inteligentemente.
Me sorprende gratamente la pintura de tu compatriota Carmen Aldunate.
Eres estupenda!
Muy buenos todos, aunque yo siento especial debilidad por Carmen Aldunate desde siempre.
Besos, compañera. Qué pena que sea la última muestra, estaba habituándome a estas entradas tuyas.
Me tienes muy mal acostumbrada a tanta belleza. No conocía a Aldunate ni Merello y me ha encantado tu explicación, pero mi sentir, se va con el estilo de Merello. Un abrazo.
Siempre, siempre me gustan tus entradas.
Lo que más, Picasso que me encanta.
Un fortísimo abrazo desde la playa y con poquísimo internet.
Mi querida amiga, aunque poco nos conocemos, intento entrar en tu espacio artístico y aprender de él.
Si me haces el hones tengo para compartir contigo regalo-premio DEDICACIÓN, pasalo a buscar, auque no estés apuntada en la lista no importa, ayer noche mis ojos ya no veían el teclado ni el borrador de la lista, hoy estoy un poco mejor , pero casi no puedo abrir los ojos. He reapartido 90 premios y estoy cansada.
Te espero en mi casa
Con ternura
Sor.Cecilia
Para mí es un placer recorrer el arte, y explicado por vos, de modo ameno y entendible, hace que me lleve belleza y conocimientos al mismo tiempo.
Muchas gracias.
besos
Buenas noches Eva :
Me he perdido por tu página esta tarde , es maravillosa . .. una suerte , porque eso me asegura unos ratos deliciosos "a tu salud" ... y créeme , que solo con lo que he visto hasta ahora , pasmadita me has dejado !!!
Todos mis respetos por tu generosidad al regalar tu tiempo y tu sabiduría .
Prunus .
El tema de la mujer dentro de la historia del arte sostiene revoluciones, rupturas, vanguardias etc. Mientras en otras facultades culturales se le ha tratado de ocultar o ignorar, en las artes siempre ha sido esencial y protagónica. Eva nos entrega otro capítulo del drama y triunfo del cuerpo y del espíritu femenino que cabalga y se expresa en las diferentes y decisivas propuestas pictóricas que se posicionan como referentes en la historia. Y lo que por un lado se trata de velar y ocultar incluso desde la misma crítica culta de la pintura, por otro el arte lo denuncia, lo revela e ilumina acompañado desde lecturas tan inteligentes como las de esta edición.
Un abrazo Eva!!!
Eva, me encanta esta página. La pintura no es uno de mis fuertes, pero aprecio lo bello y lo que toca mi alma. Me gusta mucho la pintura con temas de la mitología griega, también los temas históricos y de tipo nativos.
Voy a pasarme más seguido por aquí.
Besos
Mi estimada Eva , es un placer contemplar estas pinturas , será que dentro del arte es lo que más me gusta.
El cuerpo femenino retratado por la mayoría de los artistas de todas las épocas es sin duda una de las cosas mas hermosas para ver.
No sabía de Carmen Aldunate -preciosa su pintura-, por lo que agradezco tu generosidad al mostrarnos obras de artistas que quizás mucho no conocemos y de otros que aunque muy vistos siempre es bueno aprender más.
Besos y me encantó este post.
REM
Me he quedado maravillado, impresionante visitar este templo dedicado al arte.
Un saludo.
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