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sábado, 10 de marzo de 2012

Tiempos para la Vida y Tiempos para la Muerte (Ensayo por Entrega)


La sociedad prehistórica comprendió que debían existir tiempos para la Vida y tiempos para la Muerte, es decir, ciclos donde el interdicto actuara y ciclos donde actuara la transgresión. La contención de la transgresión posibilita a la Vida ordenar y organizar, crear y producir, progresar, prevenir y acumular. El alzamiento del interdicto permite que la Vida derroche y dilapide, se caotice y se exponga y se despliegue efusiva y lúbrica, exaltada y extasiada hacia los ámbitos inmateriales de la existencia.

El miedo a morir, inscrito en la raíz de nuestro cerebro, grabado a fuego en nuestra memoria primitiva, ha inducido a las sociedades de todas las épocas a generar mecanismos para vincularse con esta emoción primordial ante la muerte. Sin que necesaria ni exclusivamente se trate de una búsqueda conciente, más bien anidada en el inconciente colectivo, dicha relación cruza de manera integral a todos los individuos y a todo grupo humano - desde el origen y hasta el siglo XXI - indiferente a la enorme diversidad de la vida y la cultura. La predominancia de determinado nexo, las particularidades temporales y locales así como las continuidades y las rupturas acaecidas en este vínculo, se reflejan en los sustratos más profundos de los sistemas de creencias que rigen a las comunidades y en los cuales se aglutinan, entre otros, códigos religiosos y populares, artísticos y sociales, filosóficos e ideológicos.


II

“ El espíritu del valle nunca muere
es la hembra misteriosa.
La puerta de la hembra misteriosa
es la raíz de Cielo y Tierra.
Ininterrumpidamente como durando desde siempre
ella actúa sin esfuerzo.”


Epigrama 6
Tao Te King, el Libro del Tao y su Virtud
Lao Tse, Maestro Taoísta



Llegado el crepúsculo, tras el hallazgo de la muerte, hombre y mujer juntan los cuerpos en un abrazo profundo. Bajo la mirada de la Muerte el acto sexual se transforma en erotismo que lo incluye y lo excede. El encuentro con el cadáver, el horror y el enterramiento han hecho nacer una nueva forma de acoplamiento que responde a las elaboraciones internas que creamos ante los mandatos instintivos de la cópula y la reproducción. Ya no son sólo los órganos sexuales los que automáticamente funcionan y participan. La psique no sólo ha accedido a la conciencia de la muerte si no que junto con ello o a propósito de ello, ha despertado a la añoranza de fundirse y disolverse en la experiencia erótica donde se funden y se disuelven, la Vida y la Muerte. Ambas dimensiones convergen en el erotismo, la Vida se estremece pletórica al punto de querer ir hacia su fin sin miedo alguno, absolutamente seducida por la Muerte. Estremecimiento y deseo, pasión -en su doble vertiente de placer y sufrimiento- éxtasis, el umbral del misterio en el orgasmo. 



31 comentarios:

Francisco Doña dijo...

Había reflexionado alguna vez sobre la vida y la muerte; pero no como lo haces tú aquí, Eva... He de seguir haciéndolo, por tanto.
Por otra parte, me apasiona el mito de Lilith, encarnado en Rachel Weisz, tal como aparece en la foto de esta entrada.
En todo caso, provocadora de reflexiones, enhorabuena por esta entrada. Me encanta tu forma de escribir.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

HOLA EVA,SABES QUE, NO SIENTO LA PREMURA DE VENIR Y COMENTAR,TUS BELLEZAS, ME DEJASTE COLGADA, JAMÁS SUPE MAS DE TI,DESDE AQUEL ENCUENTRO BL0OGUERO EN BS AS...NI SI NI NO...NO ME GUSTÓ,Y TE LO DIGO!
EL ROMANCE,ENTRE COMENTADORES,SE MUERE,EN UN PUNTO,Y NUNCA SE DÓNDE...ME FUI DE LAS REDES SOCIALES,LA VIDA ESTÁ EN LA CALLE,NO QUERÍA DEJAR PASAR ESTE TEMA...
UN ABRAZO
HASTA SIEMPRE,SE FELIZ!!!

LIDIA-LA ESCRIBA

S. Oró dijo...

Eva felicidades por esta nueva entrega, tu forma de hilar el relato es formidable, vas consiguiendo el misterio que el lector necesita para querer continuar. Besos.

Gustavo Figueroa Velásquez dijo...

La Vida y la Muerte, su estrecha relación, los mitos inherentes a ambos estados de la materia, en nuestro caso, al Ser humano y el surgimiento de nuevos desafíos que,
por bellos o terribles, no detienen nuestra sed de encontrar respuestas a nuestros constantes interrogantes.
Tu ensayo es, a la vez que sorprendente, un derroche de poesía en prosa pues las palabras fluyen de una manera viva y bella, hasta tal punto que me he sentido emocionado y fascinado leyéndote.
Te envío mi aprecio y mi admiración querida Eva.

PACO HIDALGO dijo...

Son alucinantes estos post sobre la muerte o, mejor, la preparación para la muerte. De acuerdo contigo en que estamos programados desde el nacimiento a temerle a la muerte, que es lo mismo que la no vida, el no vivir, es decir, nada, la nada. Pero, ¿Cómo quitárnoslo de encima? Me sigue viniendo a la cabeza el verso de Sabina: "La muerte es una amante despechada, que juega sucio y no sabe perder". Un placer leerte y saludarte. Besos.

Nieves Martín dijo...

La muerte, alguien está preparado para afrontarla sin temor, creo que no aunque alguien está preparado para la vida...

La vida y la muerte tan insiertas y tan unidas que una no existe sin la otra.

Me encanta esta temata, da para reflexionar tanto...

Besitos :)

Felicidad Batista dijo...

Eva, me resulta muy interesante y bastante clarificador situar al erotismo como conciencia de ese tándem indisoluble de la vida y la muerte. Ese ritual físico y placentero donde desembocan los cauces de los dos ríos: el que da la vida y el que se la lleva. Siempre por esa ruta interminable de Sísifo.
Es un lujo leer ensayos de esta calidad y profundidad de análisis con esa prosa atractiva y estética.
Abrazos

Pilar Abalorios dijo...

Siempre un lujo leerte y aprender de tí otro modo de contemplar la realidad y tomarse un tiempo para la reflexión.

Norma dijo...

Gracias por esta entrega, es una buena reflexión, todas las opciones son válidas.
Besossssssssssssssssss

Segundo Sánchez dijo...

Me ha sorprendido esta reflexión uniendo la vida y la muerte con el momento de la cópula, el erotismo como situación en que sentimos la vida y la muerte a la vez.
Interesante explicación que me lleva a plantearme interrogantes que nunca hubiera imaginado.
Un saludo.

Gaby* dijo...

La muerte forma parte de la vida, no hay modo de no dejar de aceptar que tarde o temprano, nuestro destino quedará en sus manos. La sabemos, la padecemos en quienes se alejan definitivamente de nuestro lado y esa pérdida puede llegar a ser difícil de superar. Pero también se hace dificultoso imaginarnos en esa instancia terminal abandonando todo lazo viviente. Aún así, es un misterio insondable, más allá de cualquier creencia que intente justificarla o explicárnosla.
Tu escrito, como siempre, tiene un enfoque diferente, esa seducción entre vida y muerte, ese acto de unión amorosa entre ambos me ha cautivado.
Siempre un gusto leerte y dejarte un beso al vuelo desde mis costas montevideanas.
Gaby*

LaCuarent dijo...

Es una de esas sensaciones que siempre me rondaban la muerte siempre ha estado presente en el erotismo y en el sexo, la buscamos y caemos en ella. Ahora tras leer tus palabras compruebo que n estoy tan loca como pensaba

M gustan cada día más tus ensayos cielo
Un besote

Natàlia Tàrraco dijo...

Eva...anatemizada, maligna,sierpe que otros adoraban benéfica, es la raíz del cielo y de la tierra, trepa el árbol de la Vida, el de la Ciencia, del Bien y del Mal.

En el valle del sexo, en el clímax, sucede "la pequeña muerte" y luego el sueño.
Besitos amiga.

ѕocιaѕ dijo...

Que buen texto. Muy reflexivo y certero.
A veces se nos olvida que existe ese ciclo en el cual se encuentra marcada la muerte como algo tan natural. Sin embargo nos topamos con esas aferraciones a las personas que se encuentran a un paso de ella. O tantas y tantas formas de morir tan injustas e inesperadas. Pues vamos creyendo que la muerte es el último episodio que nos tocará presentarle al auditorio cuando a veces ese ciclo se presenta a media función.

Saludos.

Abela dijo...

Curioso, el sexo, la cúpula como medio de aferrarse a la vida, como una forma de enfrentar la inexorable muerte.
Me ha gustado tu reflexión, nunca hubiera llegado a ese punto, yo soy bastante mas terrenal, felicidades por este magnifico ensayo. Bss

Pablo Fer Racines dijo...

Es apasionante ver con que intensidad caminas alrededor del estudio del erotismo de J. Bataille , donde se funden la vida y la no-vida.

Eva un saludo frateno , un abrazo infinito.

Ambrosía ignota dijo...

Hola Eva

ahora que hablas de los estados a los que se adhiere el ser humano, caigo en cuenta de la posibilidad que tramamos, hombres y mujeres, sería mejor avanzar sin tiempo y sin condición, solo vivir, así me gusta, como sueles describir.

El 12 de diciembre se acaba el mundo, te invito a mi barco, debemos hacer algo por la existencia (te guiño el ojo)

besoote

Unknown dijo...

Qué respuesta contundente ante la sorpresa de lo inesperado en la comprensión de que hay final. Tal vez, en esta rebeldía para la negación, haya nacido la primera intención del Amor para hacer el amor. Antes, sin el condimento de la necesidad,el acto habría sido como un resfrío.
http://enfugayremolino.blogspot.com/

Neogeminis Mónica Frau dijo...

Hola Eva!, algo tarde, pero paso a leerte, siempre disfruto tus escritos.
Entiendo el atractivo seductor -a la vez que temeroso- que llega a producirnos la idea de la muerte. No llego a comprender bien la relación sexo- muerte, aunque supongo que se referirá a la expresión "pequeña muerte" que alude al éxtasis.
La idea de ciclos sucesivos de vida y muerte es algo difícil de aceptar sobre todo cuando lo planteamos en primera persona.


Un abrazo.

Penélope Sierra dijo...

Un espacio donde leer desde el respeto...

FJavier dijo...

"Eva esculpe esta arcilla de palabras con su habitual maestría. Ella penetra, por esos rincones reservados a la fascinación, desplegando su arco iris de colores con la certeza e indiferencia de una diosa. Ella habla de la muerte y la muerte misma se ensimisma. Habla del amor y el universo rememora su orgasmo primigenio. Cuidado, Eva es poderosa, lo sabe y disfruta conspirando contra ella misma."

¡Ave!, Eva.

maruja dijo...

Si, tu blog es siempre de leer y reflexionar; a veces te confieso que me supera.Nada de esas estupideces de buen dia o de lo que van a desayunar. No siempre con continuidad, pero si con constancia te sigo, ergo tu sigue. Un abrazo

San dijo...

Hermosa forma de presentar el hecho de que la muerte forma unión con la vida. Aceptar este hecho no es tarea facil en nuestra cultura.
Siempre un placer leerte Eva.
Un abrazo.

Tatiana Aguilera dijo...

La gran mayoría tememos a lo desconocido. Yo le temo. Yo me difumino si pienso que llegará el momento del "no ser" -prefiero llamarlo así-. Eufemísticamente resulta más aceptable, algo parecido sucede con otras palabras cáncer, sida, etc.; pero retomando la idea del ensayo...La vida y la muerte, ambos polos antagónicos, se dan la mano al enfrentarse uno al otro. El dolor y tortura del cuerpo, que gime, clama, aúlla, se desencaja en un suplicio extremo que desfigura las facciones. En ese instante preciso cede la agonía, y ese rostro que ha cruzado la línea de la amargura, se transfigura en una imagen de dulce paz, en algo parecido al placer. La muerte entonces, ha copulado con la vida...
Un beso Eva

Noris Marcia dijo...

Eva, excelente texto, la conexion entre la vida y la muerte es valida. De la forma en que has expresado tu propia opinion, animan a no tener temor a la muerte. A todo le llega su hora, su momento y nadie se queda excluido. Me encanto. Un beso, linda.

maria candel dijo...

Por eso, bien llaman los franceses al orgasmo "le petite mort" es la unión de la vida con la muerte por medio del erotismo, el transcender a través de una unión, mas poderosa que la suma de los dos.
Un gusto leerte, amiga, y reflexionar con tus ensayos.

Lechuza Ruborosa dijo...

creo que lo que tu experimentas en tu escrito, para muchos es, o fue realidad. la certeza de la muerte nos hace aferrarnos a las cosas vivas, que dan vida, podría decirse que un enfermo que tiene conciencia de la muerte se aferra a la magia de lo erótico, del amor, buscando sentir la vida que permanece en ellos,cuando hacemos el amor deberíamos tener conciencia de finitud, entonces nuestro goce sería infinito...
saludos

Perlita dijo...

Reconozco que el ensayo requiere preparación, dedicación y miradas a muchos puntos de filosofía.
Me ha encantado leerte porque hilas muy bien tus conclusiones, pero...No me paro a profundizar en esa relación a la que llegas entre las acciones,las cosas naturales,como el acto sublime del amor y la muerte.
Si la idea del final de nuestros días estuviera tan presente en todo lo que hacemos, menuda amargura. La idea de la predestinación fatal, es algo que está ahí pero ha de servir como gozo y superación, nunca como la sombra fantasmal que anula y llega a entristecer una existencia siempre breve.
¿Te dije ya que me encanta la presentación de tu blog?
Un abrazo, Carmen Sabater

★MaRiBeL★ dijo...

(\_(\
(=' :') :*
(,('')('')¤°Feliz Semana Santa!
★MaRiBeL★

El Drac dijo...

Buena entrega aunque para mi gusto no muy convincente; creo que todos vivimos siempre de espaldas a la muerte, como bien sostienes en una entrada adyacente; creo que en ningún momento somos plenamente concientes de que vamos a morir incluso estando ya en las postrimerías; por ello no puedo imaginarme a seres primitivos temiendo a la muerte.

Bueno, de cualquier manera, tus reflexiones son muy apasionantes.

Un abrazo Eva

Ana dijo...

Me acordé de una partecita de la película Medianoche en París.
Diálogo entre el personaje y Hemingway:
¿Has hecho el amor con una mujer hermosa?
- Mi prometida es muy sexy.
- Y cuando haces el amor con ella sientes pasión verdadera y bella, y por al menos ese momento pierdes el miedo a la muerte.
- No, eso no pasa.
- Creo que el amor real crea un refugio de la muerte. Todos los cobardes vienen de no amar a no amar bien, que es lo mismo. Y cuando un hombre que es valiente y verdadero, mira a la muerte en la caza como unos cazadores de rinocerontes que conozco, o Belmonte quien es realmente valiente. Es porque aman lo suficiente como para sacar eso de su mente. Hasta que regresa como lo hace en todos los hombres. Y entonces tiene que hacer el amor bien de nuevo. Piénsalo.

Besos!!