Antes que mi hija fuese madre, era yo bastante intolerante frente a sus devaneos emocionales. Quizás porque su necesidad de apego y de ser escuchada, si no mayor, era más visible y exigente o se expresaba de manera más palpable que iguales necesidades en mis hijos; a lo mejor porque inconscientemente yo, como mujer exageradamente atada a iguales delirios, no quería bajo ningún punto de vista que mi retoña heredara ese extremado gen o porque atávicamente -sin saberlo- sabía que aquello le traería estéril sufrimiento, secuelas innecesarias, en fin, miedo a verme en ella reflejada. El caso es que cuando supe que iba a ser abuela y más aún después del nacimiento de mi nieta, por una parte, tomé conciencia de aquello y por otra, sentí una proximidad y una empatía hacia mi hija que nunca antes había experimentado de ese modo, tan uterino y como tal, tan esencial, tan único, tan intenso y pasional. Y como todo es cambio y el flujo de la vida está en perpetuo movimiento, a poco andar, ella que -tras mi rehabilitación- había retornado a mi, con el alma de Amparo en su vientre, se fue de nuevo, se fue lejos, nos separaron 500 kilómetros de distancia y aquella lejanía permaneció durante dos años. Optó por su relación de pareja, optó por facilitar la paternidad de un padre que a pesar de su juventud deseaba serlo y yo estuve de acuerdo con ello. En aquellos múltiples días de separación a esta madre le ocurrieron muchas "cosas": que ya, que ya tiene que hacerse adulta quiera o no y enfrentar el brusco viraje que se ha producido en su destino, que ya, que no hay más que aceptar que el camino que se presumía o se veía venir para su existencia no sería posible, que sería otro - ni peor ni mejor pero muy diferente-, que la responsabilidad que a mi me cabía en todo esto era un hecho imborrable pues si yo no me hubiese enfermado al punto límite en que lo hice, que - así mismo- la culpa es inútil y paralizante y, finalmente... la absoluta certeza que debía yo brindar el impulso que estuviera a mi alcance para que este nuevo sino emprendiera su rumbo y poseyera las alas necesarias. A veces, sin que mediase pensamiento alguno, sentía en mi pecho un vacío muy grande, un espacio deshabitado que iba llenándose con su imagen y su recuerdo. Lejos, lo se, a veces a ella le sucedía lo mismo. Y ambas, llorábamos.
Desde la distancia, paulatinamente, mi hija fue mostrándome su vigor, su solidez, su resistencia y era yo capaz de sostener y contener sus momentos de confusión, de fragilidad y de tristeza.
Desde la distancia, paulatinamente, mi hija fue mostrándome su vigor, su solidez, su resistencia y era yo capaz de sostener y contener sus momentos de confusión, de fragilidad y de tristeza.
Visible fue como lo acontecido provocó transformaciones positivas. Ella se hizo más fuerte, yo, más receptiva. Ella más autónoma, yo más generosa y compasiva, más dispuesta a aceptar su debilidad... yo, más en ella. Y como todo es cambio y el flujo de la vida está en perpetuo movimiento, por diversas razones (afectivas y laborales principalmente) fue imperioso su regreso y el de su familia. Para que ello fuese posible no existía otro modo mas que recibirles por un tiempo en mi casa. Entonces, aquel mayor equilibrio que en la lejanía se había producido entre esta madre y su hija, encontró su contraparte en los desequilibrios que su vuelta produjo en mi entorno íntimo más cercano, especialmente en mi pareja. Un vínculo éste sostenido por una década que ya acarreaba su propio desgaste y que terminó por descompensarse completamente. Hoy se y comprendo que una crisis personal suya, en aquel momento no reconocida, precipitó dicho desenlace.
Así fue como la alegría de tener cerca a mi hija nuevamente, la satisfacción de poder ayudarle a formar su propio hogar para emprender definitivamente una vida independiente, la oportunidad de conocer en mayor profundidad al papá de mi nieta y generar con Amparo una relación más honda... hubo de pervivir bajo la amarga sombra del fin de un amor, un amor muy grande que sufría ahora una muerte dolorosa. Y pervivió; develándose entonces la GRAN TRANSFORMACION; esa que me parece aglutina la suma de cambios y evoluciones que mi Ser venía experimentando desde hacía rato. Precisamente, subsistió en medio del cataclismo de aquel final, la férrea convicción de estar haciendo lo correcto, indemne -a pesar del dolor-la otra felicidad por encima de todos sus costos; presente la fortaleza en vez de la antigua depresión, el logro de un objetivo por sobre los escollos e impedimentos, la aceptación, la mente en el presente, la disolución de la angustia y la capacidad de postergar mis sentimientos y preocupaciones personales, en pro de dar lo que sentía era un imperativo espiritual impostergable.
Así fue como la alegría de tener cerca a mi hija nuevamente, la satisfacción de poder ayudarle a formar su propio hogar para emprender definitivamente una vida independiente, la oportunidad de conocer en mayor profundidad al papá de mi nieta y generar con Amparo una relación más honda... hubo de pervivir bajo la amarga sombra del fin de un amor, un amor muy grande que sufría ahora una muerte dolorosa. Y pervivió; develándose entonces la GRAN TRANSFORMACION; esa que me parece aglutina la suma de cambios y evoluciones que mi Ser venía experimentando desde hacía rato. Precisamente, subsistió en medio del cataclismo de aquel final, la férrea convicción de estar haciendo lo correcto, indemne -a pesar del dolor-la otra felicidad por encima de todos sus costos; presente la fortaleza en vez de la antigua depresión, el logro de un objetivo por sobre los escollos e impedimentos, la aceptación, la mente en el presente, la disolución de la angustia y la capacidad de postergar mis sentimientos y preocupaciones personales, en pro de dar lo que sentía era un imperativo espiritual impostergable.
Y como todo es cambio y el flujo de la vida está en perpetuo movimiento: lo que parecía naufragar de manera inexorable sin encontrar salida en una enceguecedora tempestad, tras muchas zozobras, enormes oleajes e inmersiones letales, viró el timón hacia nuevos océanos... ya que "...las muertes cíclicas de una relación de pareja nos muestran que una vida compartida con todos sus incrementos y todas sus disminuciones, con todos sus principios y todos sus finales, son las que crean un fiel amor sin parangón. Dentro de una relación amorosa hay muchos finales. Pero, en algún lugar de los delicados estratos del ser que se crean cuando dos personas se aman, hay un corazón y un aliento. Cuando se vacía un lado del corazón, se llena el otro. Cuando se agota un aliento, empieza otro".
No sólo todo es cambio y el flujo de la vida está en perpetuo movimiento si no que estas variaciones y oscilaciones inentendibles y aterradoras, siempre poseen un sentido y una misión incalculables. Que estamos unidos en lo absoluto no es un decir, podemos comprobarlo cuando -por ejemplo- vivimos acontecimientos como los narrados en estos dos últimos posts y al final del día vemos que en esta cadena de sucesos, cada persona involucrada - un eslabón - fue un impulso transformador para los demás. Los malos ratos se olvidan, lo que haya que perdonar se perdona, las heridas cicatrizan... lo que queda es un tremendo aprendizaje.
No sólo todo es cambio y el flujo de la vida está en perpetuo movimiento si no que estas variaciones y oscilaciones inentendibles y aterradoras, siempre poseen un sentido y una misión incalculables. Que estamos unidos en lo absoluto no es un decir, podemos comprobarlo cuando -por ejemplo- vivimos acontecimientos como los narrados en estos dos últimos posts y al final del día vemos que en esta cadena de sucesos, cada persona involucrada - un eslabón - fue un impulso transformador para los demás. Los malos ratos se olvidan, lo que haya que perdonar se perdona, las heridas cicatrizan... lo que queda es un tremendo aprendizaje.
- A mis queridos lectores y lectoras un sentido agradecimiento por haber consentido este arranque de Diario Intimo que se infiltró súbitamente en La Cala.
- La cita utilizada corresponde a Clarissa Pinkola Estés -psicoanalista yungiana y gran contadora de cuentos.
- Las imágenes utilizadas corresponden a pinturas cinéticas de Víctor Vasarely.
- La cita utilizada corresponde a Clarissa Pinkola Estés -psicoanalista yungiana y gran contadora de cuentos.
- Las imágenes utilizadas corresponden a pinturas cinéticas de Víctor Vasarely.
36 comentarios:
El ser humano tiene muchas debilidades, hay algunas manifiestas y otras soterradas que se hacen presente cuando menos lo esperamos, tratar de salir de esas debilidades es, en verdad, tarea de titanes; lastimosamente no depende de nuestra voluntad sino de nuestra psiquis, nuestro organismo contra el cual nada podemos hacer, de tener alguna anomalía. A veces las circunstancias nos ayudan a salir de esas situaciones de manera fortuita, otras simplemente nos hundimos y quedamos en el fondo de ellas como despojos humanos.Buen relato que nos hace reflexionar sobre las grandes batallas que se libran en la vida y de las cuales poco se sabe. Un gran abrazo Eva.
Hoy es el Día de la Madre en España. Espero y deseo que hayas disfrutado tanto de tu hija, como tu hija de Amparo.
Ánimo con tu transformación, mujer coraje.
Un fuerte beso.
Es maravilloso pensar que el cuerpo humano no se detiene jamás a lo largo de nuestra vida...
Es fantástico observar las continuas e imperceptibles transformaciones que sufrimos con el paso del tiempo...
Es milagroso poder echar la vista atrás, y darse cuenta que tu movimiento tiene energía añadida por tu compañero de viaje....
Todo está interrelacionado...
Nuestros hijos, cual gotas de agua, adoptan la forma del recipiente que los creó,
En este caso, seguro que tu hija es tan buena persona como tú...
Salu2
Eva: qué fuerza trasuntan tus palabras. Tu escrito es una especie de síntesis de todo un período de tu vida y de tu hija en el que ambas estuvieron pasando por fases complementarias, armonías y posteriores desarmonías, pero finalmente llega, cuando hay amor, el acomodamiento. Cuando escribís tu relato ya estás afuera de esos momentos de alegrías y penas, y esto le da a tus textos esa fuerza a la que hice referencia, la fuerza de lo vivido. Es admirable!!!
Gracias por tus palabras en mi blog, siento que es una gran cosa haberme topado con el tuyo al que arribé sin saber por dónde, pero seguramente así debió ser.
Estoy de acuerdo contigo,Eva.Cuando se vacía una parte del corazón,porque muere una etapa en el devenir de la vida..El misterio del ser prepara la otra parte del corazón y comienza la vida de nuevo creándose y recreándose como un milagro,que nos sorprende y nos alienta..
Asi es la vida vivir y morir viviéndonos siempre.
Mi felicitación por tu amplia perspectiva y tu temple espiritual.
Y mi gratitud por compartir y dejarnos tu huella genuina y llena de matices.
Mi abrazo grande de mayo.
M.Jesús
Imagino lo que has debido sufrir y lo mucho que debes amar a tu hija y a tu nietecita Amparo. ¡Qué difícil se hace la vida a veces!
Pero el AMOR con mayúscula es así y la vida, es inevitable, está sujeta a etapas y evoluciones.
Muchos besitos
Hola querida Eva así es la vida
siempre que ganamos algo,terminamos
perdiendo por otro lado, pero lo
importante es sacar solo lo
bueno de lo que los pasa, y seguir
adelante,gracias por compartir
parte de tu vida,que seas muy
feliz con tu familia.
Un abrazo grande que estes muy bien.
Es la vida misma, es el aprender continuo de la actitud positiva de las personas de buena voluntad. Así crecemos, si señora, así nos enriquecemos, así evolucionamos. Para que al final de la vida el último suspiro contenga la suma de todos nuestros amores y los de los demás. Preciosa narración, me alegro que todo se haya encauzado, gracias por compartir. Os deseo lo mejor.
Por cierto mi post de mañana también va de cambios radicales y de amor maravilloso.
Comparto este versito mío contigo:
"Creo en el amor eterno,
pero nó en la eternidad".
Jodorowsky,a quién muy poco he leído,confieso,le escuché decir que:"La razón es una pequeñisima barca,del tamaño de una nuéz,sozobrando en el infinito océano de la locura".Entonces,¿como le hacemos para llegar a puerto,sin tantas magulladuras?.Fijate que se me ocurre mentar al amor.Que si no llegamos no sea por falta de ese combustible,y que si ese combustible se acaba,se acaba.Solo yo me recriminaría el haber sido deshonesto,o sea,llegar a la otra orilla fingiendo.Si eso no aconteció,entonces,todo lo que sobre del arqueo,será legitimamente nuestro.Y tú llegas,golpeada,exausta,pero con dos amores...¿Es que, se puede esperar más de un naufragio?.
Disfruta tus tesoros.
Besos y sonrisas.
Me gusta leerte y esta nueva etapa Eva, todos pasamos por cosas, muchas cosas y se lo que cuesta sacarlas afuera. Te admiro mucho más ahora, no sabes cuanto!
Besitosssss
EVA QUE TU VIDA TE ASUSTÓ, SOLO POR UN RATO, VEO QUE DE TAL PALO, TAL ASTILLA. SIEMPRE CREEMOS QUE NUESTROS HIJOS NO PODRÁN CON SU VIDA, OLVIDANDO QUE HICIMOS LO MISMO CON NUESTROS PADRES,COMO TU DICES LOS ESLABONES DE LA CADENA GENÉTICA NO SE CORTAN, LOS VALORES HUMANOS SE FIJAN Y APARECEN SOLO CUANDO LOS NECESITAMOS, MOSTRÁNDONOS LA PERSONA QUE SOMOS REALMENTE. QUERIDA AMIGA COMPARTO TU VALOR Y EL DE TU HIJA, LA VIDA NO LAS LLEVA POR DELANTE. LAS ABRAZO
GAUCHO MATRERO ES UNA FIGURA DEL MARTIN FIERRO, LIBRO DE JOSE HERNANDEZ, QUE NARRA LAS AVENTURAS, PRECISAMENTE DE UN GAUCHO BUENO Y TRABAJADOR, QUE ES LLEVADO A LA LINEA DE FORTINES Y ALEJADO DE SU FAMILIA, LOGRA ESCAPAR, Y A ESE PERSONAJE FUGITIVO SE LE LLAMABA MATRERO, ERA COMO UN REBELDE PERSEGUIDO POR LA JUSTICIA. NO SE LA ETIMOLOGIA DE LA PALABRA.
Cuando comenzamos la transformación desde adentro, podemos ver las cosas desde otra perspectiva y se empiezan a sanar heridas profundas, es sumamente terapéutico escribir, felicitaciones amiga, el libro de Pinkola "mujeres que corren con los lobos" es fantástico y nos muestra con sus cuentos la diversidad de la mujer salvaje que todas llevamos dentro!
Abrazos y a seguir recorriendo el nuevo camino!
Admiro ese don para conocer y taducir en perfectas palabras todos los cambios de tu vida.Con qué profundidad buceás en tu interior y emergés liberándote de tus sufrimientos compartiéndolos con tus lectores.
Mi madre no llegó a experimentar ese vínculo cuando tuve mi única hija porque lamentablemente no estaba viva y lo añoré muchísimo. Ojalá yo llegue con mi hija...debe ser hermoso ser abuela!
Un abrazo!
Eva:
tener la valentía de aceptar y enfrentar esos cambios dispuesta a crecer como persona hablan de tu calidad humana. no todos se animan a hacerlo.
El amor de madre, sobre todo, nos da la fortaleza par andar los caminos más duros e importantes.
Gracias por participarnos de esa inmensa transformación de tu interior.
un abrazo....
incosciente o que se yo, hace unos días hablaba con una amiga cuando cae en cuenta en la vida de lo que hizo y no hizo, e inician las conclusiones. Sin duda buen método este el tuyo, además creo que te estoy copiando a hacer este análisis interiormente.
Beso Cala,
Has luego, todo lo mejor!
muchas gracias por compartirnos este tan significativo post.
abrazos
Estremecida estoy. Ahora he comprendido, gracias a tus palabras, sentimientos que no podía expresar. !Como quiero a mis hijas! Ahora he comprendido el desmedido amor de la mayor por sus hijos. Ahora he comprendido el amor que me profesa. Yo si que no se expresarlo. Un fuerte beso
Eva, que bonito es aceptar con optimismo nuestra trayectoria en la vida, con sus fallos y sus aciertos y tener la valentía y generosidad que tienes tú, para compartirlo con los demás, mostrándote ante nosotros tal y como eres, brindándonos tus experiencias para que sirvan de apoyo a los que como tú les ha tocado vivir y sentir "Como todo es cambio y el flujo de la vida está en perpetuo movimiento"... ¡Que cierta y hermosa frase!
Una vez leí en un libro que lo importante no es lo que le sucede a uno, sino como lo enfrentamos, pienso que en el caso de tú hija, eso es lo verdaderamente importante, pues "esta es su vida", la "otra", la que se "presumía" no era la suya. En la otra, en la que se presumía... ¡Amparo no sería una bella realidad!
¡Me alegra tanto que todo esté bién de nuevo en tu vida!
Un beso grande
Madre mía...
Soy Lo que soy , gracias a lo que tu forjaste en mí.
Como no he de luchar , si te vi desgarrar el alma por mí y mis hermanos?
Como dejarme abatir , si no hubo un solo día en el que no me demostraras el amor profundo que nos tenías?
Ayúdame , me dijiste una vez.
Cerré los ojos y lo hice con el corazón abierto, las manos extendidas y la fe a flor de piel.
Ayúdame , te dije una vez.
Con una sonrisa en la cara y un abrazo poderoso recibiste a mi hija en tu regazo, a solo segundos de haber nacido.
Sin importar cuantas veces caigas , cuantas veces te sientas morir , yo estaré ahí , madre querida , sólo para recordarte la GRAN MUJER QUE ERES.
El orgullo se apodera de mí.
No soy una hija del viento.
Soy hija de la Mujer austral.
Lo grito a los cuatro Vientos.
Te amo.
Antonia.
Salir de la fosa es tremendamente difícil. Tengo la fortuna de un hombre maravilloso a mi lado que, unas cuantas veces, no ha dejado que caiga. Sola no hubiera podido.
Gracias por visitarme y comentar, ha sido un placer leer estos dos posts tan emotivos y personales.
Un besito para la semana.
Hola Eva, gracias por abrir tu corazón y compartir con nosotros tus experiencias, unas buenas y otras malas, de una forma tan bella y tan emotiva. La vida da muchas vueltas decimos por aquí y aunque no lo creamos nos estamos transformando diariamente, estamos aprendiendo diariamente en todos los terrenos, sobre todo en el afectivo, y a pesar de que algún acontecimiento sea negativo, siempre podemos extraer un lado positivo aunque sea mínimo.
Un fuerte abrazo
Tan clara en la oscuridad, tan honesta en la confusión... tan bueno es leerte!!!!
Saludo y beso.
¡Pero que estirpe de mujeres poetas y almas nobles! Antonia sin duda ha heredado tu talento y tu nobleza Eva y creo adivinar que Amparo seguirá las huellas...
¡Cuanta admiración, respeto y cariño generas a tu alrededor!
Es todo un privilegio para mí habernos encontrado y poder contar con tus valiosas y útiles reflexiones.
Un abrazo grande Eva
Apreciada Eva,
Gracias por exponer tus pensamientos, tus reflexiones, tus sentimientos de manera tan sincera y desnuda, todo ello expresado con esa riqueza y variedad del idioma común del que haces gala.
Gracias por tus amables comentarios sobre el trabajo que hago por la divulgación del antiguo arte de los miniaturistas y por la recuperación del olvido de muchos de ellos.
Un saludo afectuoso desde España
Eloy Martínez Lanzas
Eva
De que forma tan bonita has descrito la vida .. sí, la vida misma. Gracias por compartirlo.
Eva,vuelvo para felicitar a tu hija por el testimonio apasionado y vital que nos ha dejado de forma clara y contundente..!!
Una maravilla..madre e hija..hija y madre..!!
Mi abrazo grande y agradecido para las dos.
M.Jesús
Esa metemorfosis que nos describes con detalles tan minuciosos, son de una gran personalidad.
Es un placer leerte, y más sabiendo que has puesto los cinco sentidos al escribir. La verdad que me gusta saber de ti, aunque no sea todo un camino de rosas.
Un beso desde Barcelona
Efectivamente, no hay nada peor que hacer planes, porque la vida ya se encarga de hacerlos por tí y en nosotros está el aceptarlo.
Mi transformación comenzó a raiz de mi separación. Ahora doy las gracias por ello. Todo, absolutamente todo te ayuda a crecer, si tu quieres.
Me gusta tu blog. Gracias por tu visita.
Un abrazo desde madrid
Hola Eva, me ha sorprendido muy gratamente tu relato. No dejas de describir los cambios en el ciclo de la vida misma con un temple envidiable. Siento que tengo mucho que aprender de ti.
Gracias por encontrarme en el camino y espero compartir contigo muchas vivencias a través de tus escritos.
Aquí tienes una amiga. Un beso.
En mi blog tienes algo para ti..
http://katy-tocandootrospalillos.blogspot.com/2010/05/mariposas-de-la-amistad-y-algo-mas.html
Besos
no suele ser un camino de rosas la vida..siempre hay espinas que debemos tomar como un aprendizaje..
muy fuerte y profundo
graciasssssssssssssss
besos
Beuno he vuelto a este texto ,primero para rendir mi admración de un ser humano como tú , esa capacidad para autodefinir tus caminos , para buscar y comprender en tus acciones y reflexiones esa cosnciencia que nos guia , esa espiritualidad a veces desapercivida , y más que eso , para alimentar la voluntad de seguir creyendo en las convicciones más profundas de tu ser , este texto es una pequeña luz para mi , por eso y por lo que con certeza creo intuir de ti .
Gracias Eva
Evam el misterio de la vida se produce constantemente. Pero tenemos que aprender de alguna manera a cortar el cordón umbilical definitivamente con nuestros hiujos. Luego nos damos cuenta de que ellos son fuertes, muy fuertes. Y de que alfinal sin darnos cuenta se han revertido lospapeles y tú eres la protegida y ellos los protectores.
Rabindranath Tagore decía que nosotros somos el arco que tensa la cuerda para enviar la flecha, que son nuestros hijos, lo más lejos posible. Pero que, cuando se ha soltado la cuerda y la flecha ha salido disparada, ya no tenemos control sobre ella que seguirá su camino...
Buena entrada, Eva. Un saludo.
Eva,
Que lo has narrado con esa claridad característica de tu prosa, mientras iba leyendo todo iba formandose en el presente. Se valora más porque en éstos brotes de diario, se puede encontrar a Eva, el ser humano...
Me identifico con lo que has escrito.
En horabuena, un abrazo.
Eva, magnífico retrato íntimo. Estoy segura de que, al mismo tiempo, te has descargado de un no sé qué que te oprimía dentro y que no te dejaba fluir ni mantener el perpetuo movimiento hacia tu futuro. Ahora, creo que estás más aliviada y tu interior más enriquecido. Un beso fuerte.
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